La dieta mediterránea [A2] #vídeo

Publicidad engañosa

Publicidad que explica beneficios que nos son reales en el producto o publicidad que ofrece cosas que no son reales. Ejemplos:

– La publicidad engañosa es muy frecuente hoy en día.
– Hay que luchar contra la publicidad engañosa.

Ensaladita aliñada

Aliñar significa echar sal, vinagre y aceite y mezclarlo todo . Ejemplos:

– ¿Aliño la ensalada con vinagre?.
– Cuece la pasta, deja enfríar, aliña y lista para comer.

El comodín

Cosa que se hace servir para fines diversos, según conviene a quien la usa. Ejemplos:

– Hay muchas frases comodín para rellenar silencios.
– ¿Se usa el comodín de la baraja en este juego? 

Restringía

Ceñir, circunscribir, reducir a menores límites. Ejemplos:

– Estoy restringiendo la grasa de mis comidas.
– El acceso está restringido  

De Nocilla

Nocilla es una marca española de una crema de cacao y avellanas. Se usa para untar en pan de molde. Quizá conoces Nutella, la Nocilla es similar. Ejemplos:

– Hoy de premio para los niños hemos hecho sandwich de nocilla.
– Hace muchos años que no como Nocilla. Vamos a comprar un bote. 

Hola, les hablo de nuevo desde este espacio. Soy la doctora Martín Vaquero, de la clínica de Medical de Madrid y el tema de hoy es la dieta mediterránea. Todos ustedes, seguro que han oído hablar mil veces de la dieta mediterránea, pero yo quiero recordársela, y para ello recurro a los alimentos que tomábamos en la infancia y lo van a entender muy rápidamente.

Por ejemplo, el desayuno. Tu madre te ponía un vaso de leche, te dejaba la caja de galletas para que cogieras las que quisieras. Pero eran galletas “María”, nada historiadas, las galletas sin azúcar, muchísimas veces lo que tienen es una cantidad excesiva en grasas, es publicidad engañosa. Otras veces, le decían, sin, eh, con fibra, con fibra, es maravilloso los alimentos porque provocan una absorción más lenta, pero las calorías son las mismas. En ese sentido tienen que tener cuidado con la publicidad engañosa.

Luego, tu madre te metía para media mañana un bocadillo de pan bien grande con algo dentro, una proteína, pero poca cosa. A la hora de la comida, tomábamos siempre o alubias, o lentejas, o patatas o arroz, un hidrato consistente de cuchara, no faltaba la ensalada, una buena ensaladita aliñada con aceite de oliva, por supuesto, un segundo plato pequeño de proteína. Y fruta. El pan, era el comodín, podíamos comer, nadie te restringía la cantidad que tenías que comer de pan.En la merienda volvías a comer un bocadillo, de “Nocilla”, de cualquier cosa, un buen trozo de pan con algo dentro.

Y para cenar, la sopa, las verduras. Después, de segundo plato, una tortilla francesa o un pescadito y poco más. Y por supuesto, la fruta, no faltaba, y el pan. Eso es básicamente una dieta mediterránea, las legumbres, las verduras, las frutas, los pescados, y todo ello aliñado con aceite de oliva.